Desaprobación de los políticos y responsabilidad ciudadana


 


La desaprobación de los políticos es una constante en la política peruana. La más reciente encuesta de Ipsos arrojó una desaprobación presidencial del 60% y 68% de los congresistas. Es decir, las autoridades electas no gozan de respaldo ciudadano, la población rechaza a la clase política. Se trata de un fenómeno que se repite una y otra vez.

 

Se pueden ensayar diversas explicaciones. Tenemos la corrupción como una de las causas del rechazo. Los políticos o aspirantes a políticos ven en la actividad una gran oportunidad para aprovechar el cargo público y obtener beneficios personales, familiares y de grupo. Ser político es un gran negocio, sin mucho esfuerzo se puede obtener ventajas que no alcanzarías en una actividad privada. Entonces, el apetito por el poder político mueve voluntades y puede permitir jugosas ganancias.

 

Existe un factor que coadyuva en esa empresa oscura. Tenemos una legislación electoral que favorece precisamente la presencia y vigencia de ese tipo de personajes oportunistas que ingresan por la ventana y luego son electos como autoridades. Pero, también tenemos otra causa de la desaprobación, no menos importante, los ciudadanos electores no se toman la molestia de dedicarle interés a la decisión de su voto. Una mayor reflexión y toma de conciencia permitiría elegir mejores autoridades. La elección es un trámite obligado que el ciudadano cumple por cumplir y decide influido por la propaganda, el marketing, las promesas o las dádivas.

 

La calidad de nuestras autoridades electas está en directa relación con las motivaciones y razones del voto de los electores. A mayor interés y responsabilidad que el elector le ponga a su decisión, mejores autoridades electas. O sea, la calidad de los gobernantes expresa la calidad de la decisión de voto del elector. Es como cuando un consumidor decide adquirir un producto. A mayor interés y tiempo en informarse sobre las ventajas y limitaciones de un producto, nos conducirá a una mejor elección. Si pasamos por alto la información, si no tenemos tiempo e interés, lo más probable es que compremos lo primero que nos ofrezcan o lo más llamativo por efecto de la publicidad.

 

El rechazo a los políticos electos, lleva en su interior la baja calidad de la decisión e interés de los ciudadanos por darle importancia a los asuntos públicos. Cuando eso cambie tendremos mejores políticos y la población se sentirá auténticamente representada por gobernantes que emergen de una decisión responsable.

 

(Foto: rpp.pe)

(Columna publicada en el diario Viral de Arequipa, 19-01-2022)

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Otra vez atizando la discriminación contra Puno: la Zona Franca

Renegar del origen, cambio de apellido: de Quispe a Quimper

Escándalo en examen de admisión UNSA 2007