Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2021

Soberanía energética y coro mediático

Imagen
  Es sorprendente a los niveles que llega el sometimiento al orden neoliberal extractivista que pregonan los principales medios de comunicación limeños. El premier Bellido solicita la negociación con la empresa Pluspetrol referidas al gas de Camisea y los alfiles de las empresas transnacionales atacan como perros rottweiler.   La mentalidad colonial de algunos sectores nubla su entendimiento y no llegan a comprender que el Estado peruano, en representación de los intereses nacionales, tiene toda la potestad para solicitar la revisión de contratos con la finalidad de beneficiar a la población y a los intereses del Estado. Es cierto que Bellido entró con fuerza con un tuit que anunciaba la nacionalización del yacimiento, si la empresa se negaba a las negociaciones; pero luego terminó presentando un oficio citando a Plupetrol para tener una reunión de trabajo el 6 de octubre en la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros.   El gobierno debe negociar con dignidad. Somos un país

Socialdemócratas. Otra manera de ser de izquierda

Imagen
  Todavía en nuestro medio se mantiene la imagen del ciudadano de izquierda como una persona extremista, atea, marxista y que emplea un lenguaje violento y dogmático. Por el lado de sus ideas económicas, es un sujeto que propugna un rol gigante del Estado,   una fuerte intervención en el mercado, regulando todas las actividades posibles y rechazando la presencia de capitales foráneos. Y por el lado político, se inclina por el recorte de las libertades, el control de la sociedad y un tufillo autoritario de imposición e intransigencia.   En realidad la imagen seguramente se va a mantener mientras determinados sectores de la izquierda no hagan el esfuerzo de inyectar pragmatismo en su actividad partidaria. Y reconozcan que en una sociedad democrática y plural conviven diferentes intereses en juego. Y que esos intereses pugnan por llegar al poder. Y que el poder político oscila como un péndulo: hoy triunfas, mañana eres derrotado. Y que la alternancia en el poder beneficia a la comunidad

¿Y el asunto de fondo?

Imagen
El Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso no fue un meteorito que vino del cielo y cayó sobre tierras ayacuchanas. Como partido fue el producto de múltiples escisiones en el seno del comunismo peruano hasta llegar a una versión maoísta que tomó las armas para iniciar la “guerra popular”, método ultraviolento para aniquilar el Estado y conducirnos al utópico edén rojo. Ese es el contexto ideopolítico. Pero también están las condiciones socioeconómicas de la región andina del Perú, marcadas por una enraizada pobreza y exclusión que gatillaba el ánimo rebelde y justificaba las conductas subversivas. Los provincianos andinos sabemos muy bien lo que significa el imperio de la injusticia, el centralismo estatal y la discriminación sociocultural. Obviamente no son la justificación para ninguna forma de violencia, venganza, terror o alucinación política, pero son condiciones reales de vida que el Estado peruano trata de corregir con lentitud, medidas parciales y muchas veces descontextual

El fanatismo que vivimos. En torno a la muerte de Abimael Guzmán

Imagen
  La muerte de Abimael Guzmán puede llevarnos a múltiples reflexiones sobre la realidad de nuestro país. Quisiera detenerme en lo nefasto del fanatismo. Se trata de una pasión irracional y desmedida hacia una idea o persona. Las formas más comunes del fanatismo se presentan en la religión, la política, el deporte y el arte. Algunos fanatismos pueden traer peligrosas consecuencias, como el religioso y el político.   Durante la época del conflicto armado interno (1980-2000) fuimos testigos de la incursión y vigencia de un partido político maoísta compuesto por alucinados fanáticos que idolatraban la violencia extrema como método de cambio social. Y a la vez rindieron un culto mesiánico a la figura de su líder. Ese culto a la personalidad se expresó en una adoración y obediencia excesiva a Guzmán.   La ferocidad de las muertes que llegó a extremos escalofriantes puede ser comprendida de diversas maneras, pero para el objetivo de este artículo es importante detenernos en las ideas faná

El machismo que nos habita

Imagen
  La congresista Patricia Chirinos denunció públicamente que el premier Guido Bellido durante el periodo de instalación de los congresistas, antes del 28 de julio, tuvo frases violentas y machistas contra ella. “Solo falta que te violen” fueron las expresiones debido a que la congresista contaba que ya fue casada y viuda. El premier ha salido a negar el insulto machista. Pero más allá del barullo, el uso político del caso y el desenlace que pueda tener este hecho, es importante poner el acento, cuantas veces sea posible, sobre el machismo enquistado y tomado como normal en nuestro país.   El machismo es la parte visible de estructuras ocultas y no tan ocultas de la sociedad. Se argumenta que vivimos sobre estructuras patriarcales que reproducen día a día la dominación masculina. Dicho de otro modo, la sociedad está constituida bajo el molde de los intereses y estilos del varón. En ese marco, las mujeres enfrentan poderosos mandatos reales y simbólicos que la colocan por debajo de la

Campaña anticomunista. Prensa, propaganda y otros espacios

Imagen
  Hernando de Soto anuncia que se quedará en Lima para enfrentar la amenaza comunista; los medios periodísticos limeños van acumulando puntos para derribar a ministros por izquierdistas y extremistas; estos mismos medios dan tribuna a políticos y expertos que endiosan el modelo y muestran lo inconveniente de las medidas del gobierno; el tridente de ultraderecha neoliberal en el Congreso (Fuerza Popular, Renovación Popular y Avanza País) son un muro de contención que orquesta mociones de interpelación y tiene claro que el objetivo es la vacancia del presidente Castillo, enemigo del modelo.   Son algunas de las perlas que muestran la cruda y dura institucionalización del terruqueo. La meta es arrinconar al gobierno y debilitarlo todo lo que sea posible. Siendo la posición ideopolítica el lado que se considera más vulnerable. Tomemos como ejemplo la entrevista que en julio pasado Jorge Spelucín, dirigente de Perú Libre, concedió a Mávila Huertas. La periodista preguntó si el dirigente e

Medios periodísticos como medios de propaganda y demolición

Imagen
  Los medios de comunicación de Lima o medios de propaganda y presión están cumpliendo a cabalidad su rol como herramientas al servicio de los poderes hegemónicos. El objetivo es ofrecer “pruebas” que sirvan de argumento para la demolición del gabinete Bellido y sembrar las condiciones para una futura vacancia presidencial. Tenemos el trabajo realizado para desacreditar a Hector Bejar como ministro de Relaciones Exteriores mostrando declaraciones descontextualizadas del pasado y ahora el terruqueo contra Iber Maraví, ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, por hechos subversivos cuando el terrorismo ya había sido derrotado.   Los medios que vienen sirviendo de medios en los dos casos anteriores son el programa dominical Panorama de Panamericana Televisión y el diario El Comercio del monopolio de los Miró Quesada. De nada sirve que los “condenados” por la “justicia mediática” se apresuren a deslindar con los actos terroristas. O que a la larga se demuestre que las versiones period