Los medios de comunicación de Lima o medios de propaganda y
presión están cumpliendo a cabalidad su rol como herramientas al servicio de
los poderes hegemónicos. El objetivo es ofrecer “pruebas” que sirvan de
argumento para la demolición del gabinete Bellido y sembrar las condiciones
para una futura vacancia presidencial. Tenemos el trabajo realizado para
desacreditar a Hector Bejar como ministro de Relaciones Exteriores mostrando
declaraciones descontextualizadas del pasado y ahora el terruqueo contra Iber
Maraví, ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, por hechos subversivos
cuando el terrorismo ya había sido derrotado.
Los medios que vienen sirviendo de medios en los dos casos
anteriores son el programa dominical Panorama de Panamericana Televisión y el
diario El Comercio del monopolio de los Miró Quesada. De nada sirve que los
“condenados” por la “justicia mediática” se apresuren a deslindar con los actos
terroristas. O que a la larga se demuestre que las versiones periodísticas
fueron tendenciosas. O que solo se exhiba un lado de la verdad. Estamos en una
abierta confrontación política anticomunista y macartista. Es una cacería
contra políticos de izquierda.
Se busca reforzar la creencia que los izquierdistas son
senderistas o filosenderistas, que la ideología marxista es terrorismo y
muerte. Inclusive se está llegando al extremo de sembrar la idea que ser
marxista o comunista es un hecho abominable que debería ser cuestionado por la
sociedad y la opinión pública. Los medios dan tribuna con entusiasmo a
políticos como el almirante Montoya o el general Chiabra que lejos de entrar al
debate lo que hacen es descalificar y anular al oponente por ser de izquierda.
Hace algunas horas el general Chiabra acaba de anunciar que
planteará una iniciativa legislativa para impedir que los maestros con
filiación política (no creo que se refiera al PPC) sean impedidos de ejercer la
docencia en el magisterio. Es decir, eliminar a los profesores con ideas izquierdistas.
Y a todo ello, los medios hegemónicos se constituyen en potente plataforma para
reproducir esos mensajes sin ofrecer una versión reflexiva o recoger las
versiones opuestas.
Los medios convertidos en medios de propaganda, en medios de
demolición. Titulares tremendistas que nos anuncian la llegada del apocalipsis
comunista al Perú, cuando en verdad lo que tenemos es un escenario de políticos
débiles y con márgenes frágiles de maniobra. Queda entonces claro que los
medios lo que buscan es servir a poderes fácticos que se ven incómodos ante la
posibilidad de un gobierno medianamente soberano que reduzca el inclemente
señorío de los poderosos.
(Fotos: Kiosko.net y Asociación de motociclistas)
(Artículo publicado originalmente en la columna Mirada Alterna del Diario Viral de Arequipa, 1-9-2021)
Comentarios